17.9.07

El sol en Berlín

Ayer fue un maravilloso día de sol, más maravilloso aún después de estas semanas con un tiempo de perros. Parecía que ya habíamos dejado atrás el verano y estábamos en pleno otoño con lluvia, abrigos y bufandas. Pero el sol ha regresado, aunque sea momentáneamente, y el domingo, sobre las 11 de la mañana, cuando Ellen Allien debía estar actuando en el Panorama, nosotros nos desparramábamos por el césped, frente al hospital, en la suave pendiente que desciende al canal, convalecientes aún de la fiesta del viernes en el Bar25 organizada por los amigos del L32.

Los cisnes nos miraban atentamente por si alguno se acercaba con comida, los llorones, al otro lado, se inclinaban lánguidamente, rozando apenas el agua, el cielo, inmenso, azul, parecía no tener fin. Mientras, nosotros comentábamos los sucesos del fin de semana, o mejor dicho, de la fiesta. El tema era la lucha libre y la idea era que la gente se disfrazase sobre ello y se realizasen distintas actividades, pero, a pesar de la buena fama del L32 organizando fiestas, todos coincidimos en que esta no había salido demasiado bien, lo cual no fue inconveniente para pasarlo genial. Momentos como la elección de los disfraces en la casa-bazar de Tarik, o los combates de lucha libre en el circo del Bar25, con Carola en pleno apogeo con su máscara mexicana, serán largamente recordados.

Pero todo lo bueno se acaba, y mis días en Berlín tocan a su fin… Tengo una larga lista de cosas que me faltan por hacer que nunca completaré, ¿qué demonios he estado haciendo estos meses para que me falten tantas cosas por ver? Esta mañana me he levantado temprano y he desayunado prontito, antes de que llegasen las hordas de los turistas, en el restaurante giratorio de la torre de la televisión, durante una hora, dos vueltas de 360 grados me han ido mostrando, a modo de despedida, una fantástica panorámica de la ciudad que tanto he disfrutado este verano.

3 comentarios:

juan rafael dijo...

Las cosas con buen tiempo sientan mejor y levantan el ánimo, excepto paisajes y demás.
Veo que ya regresas hacia el calor.
Saludos.

Anna A. dijo...

Resulta imposible no sentir nostalgia de Berlin con tus fotos. Estás seguro que quieres volver? Yo todavía no me hecho a la idea.
Tengo un regalito en el blog. Échale un vistazo.
Besos.

Juan Rayos dijo...

vaya sorpresa encontrarte por Berlín Anna! que bueno! ya que no voy por Barcelona...
Si! desde luego que me gustaría volver, pero ya veremos cuando...
Besos.